El salvado es el resultado de una parte de la molienda de los granos de cereales, procede de las capas más externas del grano de avena. El salvado de avena es muy versátil se puede utilizar de muchas maneras e incluirlo en varias recetas, una de las formas más fáciles de consumirlo es de forma directa, podemos agregarlo en elementos como el yogurt o la fruta del desayuno, aunque también podemos ocuparlo para preparar platos más complejos, desde panes hasta galletas y bizcochos.